El
partido disputado el pasado sábado 4 en Munabe por nuestro equipo cadete tuvo
dos partes muy diferentes. Los dos primeros cuartos del equipo fueron
muy buenos, con intensidad en defensa y con un juego fluido en
ataque. El balón circulaba con criterio e incluso se conseguía
anotar mediante los sistemas trabajados las últimas semanas. Sin
embargo el equipo de Berrio-otxoa, luchador y ordenado, conseguía
mantenerse cerca y al descanso la diferencia en el marcador era solo
de 5 puntos.
La
decoración cambió totalmente en el tercer cuarto. Berrio-otxoa planteo
una defensa zonal presionante con continuos dos contra uno que
bloqueó el ataque de los nuestros. A pesar del tiempo muerto y de
haber preparado durante la semana el ataque contra zona los nuestros
se mostraban inoperantes en ataque y la desesperación también hacia cometer
errores atrás. Así y con el marcador claramente en contra
se intentó la remontada subiendo líneas en defensa. Sin embargo,
todo lo que se recuperaba gracias al esfuerzo defensivo se
desperdiciaba por culpa de ataques sin cabeza marcados por el
individualismo. Finalmente derrota por ocho puntos y un recordatorio
para los jugadores de que aun queda mucho por aprender. Hay que saber
gestionar mejor la desesperación cuando no estamos acertados y
confiar mas en el juego de equipo y en los compañeros. El camino
continua.
No
os perdáis el próximo partido el sábado 11: jugaremos
contra Jarrilleros B a las 10.00 en la Ikastola Kanpazar, en Portugalete.
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