Fuerte varapalo
para nuestro cadete en el partido del domingo por la tarde en el
colegio Escolapios de Bilbao. No fue ni mucho menos el equipo que se
vio contra Boskozaleak en el último encuentro. Desde el principio
estuvo marcado por la baja intensidad en defensa de nuestros
jugadores y el individualismo en ataque y así es muy difícil
llevarse la victoria y más jugando fuera. El primer punto a mejorar
de cara a los cruces es la actitud porque no se puede tener la
mostrada en éste último partido.
Lo mejor es que el equipo sabe que
puede jugar muy bien al baloncesto pero para eso deben de estar muy
sólidos atrás, moviendo muy rápido la defensa, controlando el
rebote y ayudar a los compañeros. En el ascenso a primera seguro que
vemos otra imagen del equipo porque tras una semana de reflexión y
entrenamientos las conclusiones que se han sacado son muy claras. Mucho ánimo al equipo en los cruces
frente a Padura para este fin de semana.
No os perdáis nuestro próximo partido este viernes a las 19.30 en Munabe y el domingo 21 en Arrigorriaga a las 12.00
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